craaaak

Mi padre fue como cualquier padre que se gasta el cuerpo y poco a poco los años y los malos tratos le van cobrando facturas a ese cuerpo acostumbrado a no padecer enfermedades. Pero mi padre se fue pronto de la cama donde vivía sus pesadillas, fue ese cuerpo de mi padre que nunca estuvo acostumbrado a sufrir enfermedades que decidió marcharse pronto.
Yo no puedo juzgar a mi padre por dejarme, cierto es que me duele todo el tiempo, algo se ha roto para siempre, dentro de mí la niña que antes era llora lastimada con esos llantos ahogados de los niños que no les permiten decir palabras.
Pero por fuera todo es como siempre, como si estuviera mi padre, la casa es la misma, el perro sigue perturbando a los pájaros que se aposentan en las plantas del jardín de mi madre. Que poco cambia el mundo sin mi padre.
Me perturba el hecho de que el mundo cambie casi nada sin mi padre, porque veo las paredes de mi cuarto firmes como siempre, la cama blanda, la sabana con flores que no huelen, todo eso que es mi día a día parece tan igual y eso me molesta, me molesta porque algo dentro de mi llora con un llanto ahogado que no lo permite decir palabras, y yo quisiera compartir ese dolor y que las paredes se cayeran y que la cama se incendiara que pasara algo malo en el mundo, porque MALDITO SEA EL MUNDO, que no entiende, se ha muerto mi padre y el parece tan tranquilo.
Mañana estaré mejor, yo lo sé, todo lo que me puedan decir sobre que todo irá mejor ya lo sé, lo sé, pero nada calma mi tristeza, mi coraje, mi dolor, no gano nada con decirlo yo lo sé, que feo. Mañana estaré mejor, pero por hoy estas serian las palabras que no pueden salir del llanto ahogado de la niña que esta herida para siempre.